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viernes, junio 15, 2007

¿Pasó un ángel?

Dicen que cuando es "y veinte" y se produce un silencio entre varias personas es porque pasa un ángel... yo digo que cuando es de noche y son las 22:20 es momento crítico para mí... situación 1:
Viernes 22:20. Me encuentro en mi casa, habiendo llegado hace unos minutos, pongo una olla en el fuego, me pongo a lavar unas cosillas en remojo hasta que zas! se mecorta la luz sin que se me baje la térmica. Puta! veamos por la ventana los vecinos... tienen luz y yo no!!! qué pasó? subo y bajo la térmica infinitas veces... nada. Me decido a telefonear al encargado del edificio para comentarle mi tragedia, me responde con que bajará al sótano y luego pasará por mi depto para chequear. Mientras, prendo unas velas (2), me dispongo a cenar a la luz de las velas, y dejo la puerta entreabierta por si aparece, ya que mi timbre no funcionará. Aparece el hombre, y lo invito a entrar a oscuras con sólo la luz de las velas...
Lunes 22:20. Bajo a abrirle la puerta a médico de urgencia, yo en joggineta, apenas un buzito, y unas simpáticas medias a rayas amarillas y rojas. Le aviso de antemano "mire que el ascensor es muy muy chiquito" (calculo que mide 0.7 x 0.7) el señor, obeso, de traje, con maletín y soporte de plástico como Su Giménez. Entramos al cubículo, por supuesto apretadísimos, y antes de presionar el piso llaman al ascensor, por lo que el médico se precipita a abrir de un saque al tun tun la puerta y detenernos entre el 1er y 2do piso, mejor dicho, vemos el cemento del piso, imposible salir por arriba o por abajo. Toca la alarma, obvio nadie aparece, me pide que grite para que me escuche mi familia pero le aclaro que me quedaría sin voz ya que mi familia no vive conmigo, vivo sola. Él llama x celular a la oficina para que el de la oficina se comunique por handy con el que blabla... en vano por supuesto, hasta que pasado un buen tiempo aparece un buen vecino y nos rescata...